Excelente. Sí, sí, excelente. Durante todo el espectáculo no hubo ningún momento de aquellos que te abstraes y piensas en la compra del día siguiente, ni momentos en los que empiezas a pensar en la obra en vez de disfrutarla. Durante todo el espectáculo estuve metido en la obra, atento a todo lo ancho y alto del escenario. De tanto en tanto hay golpes de efecto, unos sorprendentes, otros muy graciosos, y entre canciones y conversaciones, se me pasó el tiempo volando.
No sé si he disfrutado más con los muñecos o con los actores (y no me refiero al actor que me gustaba, ni al que era casi clavadito a mi amigo Carlos). Porque las actuaciones tanto de unos como de otros eran muy buenas. Los actores viven la acción tanto como sus muñecos, y tienen una versatilidad de voces y de registros digna de admiración: cambian de personajes, cambian de voces, comparten personajes... y ni te das cuenta si no te fijas.
Todo el espectáculo es un encadenado de temas que van desde lecciones morales presentadas con ironía, hasta lo más terrenal (y hasta aquí puedo escribir). Si no has visto nada del espectáculo, parece en principio que vaya a ser una obra de teatro más bien para niños, con risas fáciles, personajes resultones, y todo muy bonito y muy positivo. Sin embargo, a pesar del parecido con los personajes de "Barrio Sésamo", casi desde el principio queda claro que no es una obra para niños (además del cartelito "Musical para adultos +12"). Y sí que transmite positividad (con altibajos entre medio), pero de una forma bastante realista.
Total, que me ha encantado y la recomiendo sin dudarlo, aunque no seas un forofo de los musicales (letra pequeña: no me hago responsable en caso de no gustarte la obra y tener que seguir un tratamiento psico-correctivo posterior).
Menos mal que la pude ver antes que dejaran de llevarla por los teatros españoles. ¡¡¡Estoy completamente de acuerdo contigo!!! ¡¡¡Una musical estupendo!!!
ResponderEliminar(Los ositos de las malas ideas, menudos son jajaja)
A.